- Área: 875 m²
- Año: 2012
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Fotografías:Mito Covarrubias
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Ante una primera visita, a fines del 2010, a lo que había sido “LA CASA GLEASON” y encontrar lo que ahí encontramos, nos permeo un sentimiento de frustración y desesperanza hacia el futuro del patrimonio de la obra arquitectónica en Guadalajara. Una finca degradada, desatendida, manipulada sin el más mínimo respeto, y en un franco proceso de desaparición, muy lejos de la mano de Dios, y mucho más lejos de la del “hombre culto”.
Este sentimiento de frustración se fue transformando en un reto, en un nuevo sentimiento esperanzador, pues lo que ahí vimos en aquel momento, es el común denominador de cientos de fincas y predios dentro del centro histórico de nuestra ciudad, el reto era y es, la creatividad en todos los sentidos, en la gestión con autoridades, en la propuesta arquitectónica, técnica y económica; había que demostrar que se puede trabajar y generar economía con respeto a lo existente, a lo rescatable, o a lo que está por extinguirse.
Una vez concluido el análisis de las fincas con las autoridades involucradas, especialmente con el Departamento de Patrimonio de la Secretaria de Cultura del Estado, planteamos puntos de partida inflexibles: El edificio nuevo tenía que retrasarse en relación a los paramentos de construcción existentes. El edificio debía generar un espacio de aire, de vacío en relación a las construcciones existentes. El edificio debía hablar de líneas contemporáneas en donde la horizontalidad fuese un argumento importante, ya que el edificio, derivado del respeto que se pretendía dar a la finca existente, nos desarrollaba mucha altura a pesar de sus cuatro niveles. El último concepto, el generar elementos de circulaciones verticales con un criterio de desnudez total y que el lenguaje formal y el uso del acero como un nuevo material dentro de la escena nos vinculara, mediante contraste a la arquitectura detallada y hasta cierto punto refinada de la propuesta ecléctica de la casa.